Esta planta de glicina vino de Argentina ( no me pregunten como vino, pero vino). Hace muchos años que nos acompaña, da unas flores estupendas con un perfume que es una delicia. Era importante tenerla porque pertenecia al jardin de Mutti, mi suegra. Como nos sobreviven las plantas!!!!, sobretodo los arboles, la gente pasa, y pasa y sigue pasando , pero ellos continuan ahi, parados, siempre de pie, orgullosos. Por eso la glicina esta ahi, cada vez que la miro recuerdo los asados abajo de la glorieta donde ella daba su sombra y esta es la misma, su mismo origen, sus mismas raices, lo que cambio fue el suelo, algo asi como nos paso a nosotras. Viajo tan lejos que hasta parece imposible tenerla. Ahora esta grande, vive en una casa, en una maceta, nunca pudimos ponerla en la tierra, tenemos mucho miedo de perderla.
Irma